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| MANUEL ANTONIO VEGA |
MANUEL A. VEGA
Cada pueblo o comunidad rural de República Dominicana tiene personajes que se destacan y alcanzan notoriedad, por su peculiar forma de actuar o ser con los demás.
Esos personajes van en ocasiones ganando respeto, cariño, y en otras, rechazo por su forma impropia de conducirse.
Esta última característica se ajusta a Carlito Baba, un personaje rural que logró ir a la universidad o pasar por ella y que es rechazado en los grupos por su exceso en el dialogo.
Carlito Baba el de Hato Mayor es un tipo capcioso, metiche, que busca siempre presentarse como alguien que domina los temas al dedillo.
Se considera un ducho o perito en cultura general.
Su peculiar forma de ser, lo obligaron extrañar su lar nativo, una comunidad donde el pasto es bueno y su gente es buena anfitriona.
Carlito Baba es tipo presumido, previsto. Esta condición le ha ganado desprecios hasta en algunos miembros de su familia.
Cuando pregunta algo, primero da una charla, es extenso en todo.
Es un híper y extremado conversador.
Al llegar a Hato Mayor, Carlito Baba ha tratado de ganar espacio en la sociedad, y lo ha ganado.
Pero cuando piensa que está bien en los grupos, es que está mal, porque busca asaltarlo, adueñarse hasta de las tertulias.
Cuando Carlito Baba es avistado por contertulios, provoca risas y miradas de burlas.
“Ya viene Carlito Baba”, afloran por lo bajo los comentarios.
Es que Carlito Baba es rechazado por sentirse conocedor del universo y por siempre querer tener la razón.
Zumban, se burlan, zahieren, porque en cuanto llega hay que dejar los temas que se están tratando, para escuchar sus sandeces.
Sus majaderías aportan poco en las conversaciones, más bien se convierte en el hazmerreír, el esperpento del grupo.
Carlito Baba el de Hato Mayor, se viste, habla y se enamora como un intelectual, pero no lo es.
El intelectual no hiere, no insulta; el intelectual es como su nombre lo indica, un erudito, sabio docto, un pensador.
Carlito Baba no piensa, vomita exabruptos, andanadas hirientes.
Es caldo de cultivo para la burla, para la risa.
Lo bueno de Carlito Baba, es, que en los grupos todo el mundo se burla de él, por su vocablos “filosóficos”.
Carlito Baba dice que es maestro, periodista, poeta, historiador, libretista, cuentista y un etc de cosas que no lo dejan caminar bien en la sociedad.
Sé que hay muchos Carlito Baba, pero el de esta historia, es muy peculiar, porque ha hecho reír a muchos. Solo con verlo caminar saltan las risas.
Es un personaje único, que todo el mundo quisiera conocer.
Te habla de veterinaria, producción agrícola, invernadero y te describe a una mujer sin verla desnuda.
Carlito Baba dentro de sus habilidades innatas cuenta con algo bueno, es solidario.
En los mortuorios carga el agua, diligencia el enterramiento, carga la silla y gestiona el café.
Es sabroso, pegajoso para ganarse los grupos humanos. Esa cualidad se le reconoce dentro de sus debilidades.
Carlito Baba el de Hato Mayor está por doquier, buscando saber que está en el tapete.
En análisis político nadie le gana, porque se cree un Peña Gómez, un líder que todo lo sabe, que todo lo domina.
Cuantas veces me he reído en estos días con las acciones de Carlito Baba el de Hato Mayor.
Ríete tu ahora, pero no procure saber quién es Carlito Baba el de Hato Mayor.
