ASÍ QUEDÓ EL CARRO DEL ACCIDENTE DONDE PERDIÓ LA VIDA ANA BELTRÈ CARRETERA EL SEIBO |
Manuel
Antonio Vega
atacando10@gmail.com
Antonio Vega
atacando10@gmail.com
Hato
Mayor.- Una mujer que ocupaba el asiento
delantero de un carro murió y otras ocho personas resultaron gravemente heridas
al colisionar un carro y una ambulancia, que llevaba los restos del propietario
de la “Dulcería Tula”, quien falleció la mañana de ayer sábado en Santo
Domingo, hecho registrado en el kilómetro 7 carretera Hato Mayor- El Seibo.
Mayor.- Una mujer que ocupaba el asiento
delantero de un carro murió y otras ocho personas resultaron gravemente heridas
al colisionar un carro y una ambulancia, que llevaba los restos del propietario
de la “Dulcería Tula”, quien falleció la mañana de ayer sábado en Santo
Domingo, hecho registrado en el kilómetro 7 carretera Hato Mayor- El Seibo.
La víctima fue identificada como Ana
Beltré de 42 años, quien regresaba de Puerto Rico al velatorio de su cuñado,
Antonio Chalas (Macho), propietario de Dulcería Tula en El Seibo.Entre los heridos, figuran Emil Reyes
Jiménez, de 30 años; Roberto Reyes Jiménez de 21; Rosario Reyes Jiménez
(estos tres presumiblemente hermanos) y Guarionex Peralta de 58
años, conductor de la ambulancia. Los otros heridos no fueron identificados de
inmediato, pero se dijo habían regresado de Puerto Rico e iban a Hato Mayor a
una diligencia, cuando colisionaron con la ambulancia que llevaba su pariente
muerto.
Beltré de 42 años, quien regresaba de Puerto Rico al velatorio de su cuñado,
Antonio Chalas (Macho), propietario de Dulcería Tula en El Seibo.Entre los heridos, figuran Emil Reyes
Jiménez, de 30 años; Roberto Reyes Jiménez de 21; Rosario Reyes Jiménez
(estos tres presumiblemente hermanos) y Guarionex Peralta de 58
años, conductor de la ambulancia. Los otros heridos no fueron identificados de
inmediato, pero se dijo habían regresado de Puerto Rico e iban a Hato Mayor a
una diligencia, cuando colisionaron con la ambulancia que llevaba su pariente
muerto.
El accidente ocurrió cuando el carro,
marca Corola, se encontró de frente con una ambulancia de la Funeraria Blandino de Santo Domingo llevaba el cadáver del empresario Antonio
Chalas.
marca Corola, se encontró de frente con una ambulancia de la Funeraria Blandino de Santo Domingo llevaba el cadáver del empresario Antonio
Chalas.
Roberto Chalas, esposo de Ana Beltré,
la víctima, tenían horas habían llegado procedente de Santurce, Puerto Rico,
por el aeropuerto de Punta Cana, Higüey.
la víctima, tenían horas habían llegado procedente de Santurce, Puerto Rico,
por el aeropuerto de Punta Cana, Higüey.
Los vehículos envuelto en el
aparatoso accidente era un carro Toyota Corola, color verde, placa A093200 y la
ambulancia marca Toyota, color blanca,
placa L208152, de la Funeraria Blandino en Santo Domingo
aparatoso accidente era un carro Toyota Corola, color verde, placa A093200 y la
ambulancia marca Toyota, color blanca,
placa L208152, de la Funeraria Blandino en Santo Domingo
Inicialmente los heridos fueron
llevados al hospital Leopoldo Martínez de Hato Mayor, donde al entrar la noche
solo dos accidentados habían sido trasladado al hospital regional Antonio Musa
de San Pedro de Macorís, por falta de ambulancia en el centro asistencial
estatal.
llevados al hospital Leopoldo Martínez de Hato Mayor, donde al entrar la noche
solo dos accidentados habían sido trasladado al hospital regional Antonio Musa
de San Pedro de Macorís, por falta de ambulancia en el centro asistencial
estatal.
Algunos de los heridos estaban en
estado delicado con rotura de cráneo, piernas, mandibular y brazos.
estado delicado con rotura de cráneo, piernas, mandibular y brazos.
Un gran taponamiento se produjo en la
carretera Hato Mayor-El Seibo, a la altura del kilómetro 7 y luego en frente al
hospital Leopoldo Martínez, donde condujeron a
los heridos.
carretera Hato Mayor-El Seibo, a la altura del kilómetro 7 y luego en frente al
hospital Leopoldo Martínez, donde condujeron a
los heridos.
Al lugar de la tragedia acudieron
brigadas de la Defensa Civil, los Bomberos, la Policía y la Amet, pero aún así
el transito se volvió un caos